Daniel Jadue, imputado en el Caso Farmacias Populares, denunció ante la Fiscalía que recibió amenazas relacionadas con su origen palestino y sus opiniones contrarias a la comunidad judía en Chile.
Según él, visitantes llegaron a su domicilio y le pegaron un adhesivo con un mensaje en árabe que menciona una tribu judía “regresando”, lo que considera una amenaza directa a su persona.
También se reportó que las paredes de su hogar fueron rayadas con la frase “Jadue a Patronato”.
Esta denuncia se presentó una semana antes de la audiencia de reformalización, cuya fecha había sido modificada por el Tercer Juzgado de Garantía de Santiago.