Diego Ancalao, tras salir de prisión preventiva (18 meses), acusó sesgos en la investigación y presiones políticas para declararse culpable del delito de lavado de activos en el Caso Convenios.
Ancalao sostuvo que solo recibió prestaciones por trabajo a la organización de Jaime Huincahue, y que las pruebas no son legítimas.
También denunció presiones de abogados del Partido Comunista para confesar y someterse a un juicio abreviado.
El Fiscal Marco Muñoz rechazó estas afirmaciones, indicando que el cambio cautelar no afecta las investigaciones en curso.
Ancalao mantiene otras investigaciones pendientes por falsificación de instrumento público relacionada con su postulación a candidato presidencial.