Desde el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) en La Araucanía señalaron que continuarán vigilantes a las políticas de seguridad del futuro gobierno de José Antonio Kast, tal como lo han hecho en todas las administraciones pasadas. En su informe anual sobre la situación de derechos humanos, destacaron que la zona sigue pendiente resolviendo el conflicto entre el Estado y el Pueblo Mapuche, una materia a la que nadie ha podido poner punto final.
A ello se suma la asunción en marzo del presidente electo, José Antonio Kast, quien se refirió a la situación de la comunidad de Temucuicui. En uno de sus últimos debates, el político señaló que podrían instalar puntos de control para identificar quién entra y sale de ese territorio.
El republicano también anunció un plan integral de 14 puntos destinado a combatir con firmeza el “terrorismo” en La Araucanía. En respuesta, Federico Aguirre, jefe del INDH en la zona, subrayó que cualquier política de seguridad debe ser ejecutada con respeto a los derechos humanos.
Según Aguirre, los Estados democráticos y de derecho se sujetan a normas y reglas que deben ser estrictamente observadas. Así, el INDH espera contar con la colaboración de las futuras autoridades locales para su trabajo continuo de vigilancia, como ha sido habitual en todos los gobiernos anteriores.
