Colbún, empresa chilena y peruana propiedad del grupo Matte, vive un buen momento en el sector eléctrico. La compañía ha logrado diversificar su matriz de generación y aumentar sus ventas, con positivos resultados financieros. Según la prensa española, Colbún podría adquirir los activos eólicos de Acciona en España, valorados en 600 millones de euros (US$ 700 millones), lo que supondría su ingreso al negocio en Europa. Colbún competiría con la emiratí Masdar y con Qualitas Energy.
Acciona inició un plan de venta de activos de su cartera de energía eólica en España para rotar activos y blindar más su rating. El plan pasa por desprenderse de un primer paquete de 440 MW ampliables a otros 360 con repotenciación, asumiendo que la situación actual del sistema se acerca al “racionamiento”.
Colbún tiene una gran capacidad termoeléctrica que puede operar en base a gas natural o incluso con diésel en momentos de emergencia. La semana pasada, el Coordinador Eléctrico solicitó a Colbún actualizar la información para la generación de su complejo Nehuenco. Esto se debe a estrechez de las condiciones de abastecimiento en el Sistema Eléctrico Nacional.
Las menores lluvias de este año en la zona centro sur han elevado los precios spot de la energía, lo que es buena noticia para las generadoras como Colbún, sobre todo aquellas que pueden despachar electricidad manteniendo los costos acotados. Las perspectivas de crecimiento y diversificación para Colbún son alentadoras.
BTG Pactual espera una buena performance de Colbún con un Ebitda de US$ 693 millones este año, un alza de un 8% respecto al año anterior, mientras que en 2026 el Ebitda saltaría hasta los US$ 783 millones. Analysts destacan la diversificación de fuentes de generación y la posibilidad de operar con diésel en momentos de emergencia como una ventaja clave.
Colbún ha tenido sólidos resultados en el primer trimestre, con un EBITDA e ingresos que superaron significativamente las expectativas y las estimaciones del mercado. Esto se debió en gran medida a los buenos resultados operativos en Chile, respaldados por unos volúmenes de ventas superiores a lo esperado, precios más altos y costos de suministro más bajos.
El menor precio del gas argentino ha aumentado su participación en el mix energético chileno. A pesar de la menor producción hidroeléctrica en comparación con el año anterior, una reducción del 26% en el costo unitario del gas provocó una baja de los costos de suministro del 9% al primer trimestre y elevó el margen a US$ 91 por MWh.