El 16.º Juzgado Civil de Santiago acreditó la responsabilidad contractual del Colegio Nido de Águilas en el suicidio de Katy Winter, estudiante de Lo Barnechea. Pese a este hallazgo, la demanda civil presentada por su madre fue rechazada debido a la prescripción legal. El trágico hecho ocurrió el 22 de mayo de 2018, cuando Katherine Winter, de 16 años, se suicidó en un baño de Starbucks luego de ser víctima de bullying.
La familia presentó una demanda por $350 millones ante el tribunal, pero la prescripción impidió que se acogiera su reclamo. El colegio había solicitado al tribunal considerar la prescripción debido a los cinco años transcurridos desde el incidente en 2018.
Posteriormente, en mayo de 2019, la Superintendencia de Educación formuló cargos contra Nido de Águilas y multó al colegio con 51 UTM, aproximadamente $3.500.000 actuales. La familia destacó dos falencias: el permiso para que Katy saliera del recinto escolar sin autorización y la falta de medidas contra el acoso escolar.
El tribunal consideró que la obligación de cuidado del colegio se inicia desde que la alumna entra al establecimiento, y que el Colegio Nido de Águilas incumplió su deber al permitir a Katy salir sin autorización. También se concluyó que debieron aplicar un protocolo adecuado para el caso.
En conclusión, la justicia estableció que no solo había una responsabilidad contractual por el bullying, sino también una obligación de resguardo psicológico y aplicación de protocolos contra el acoso escolar.