Distintos escenarios se abren para las empresas chilenas que producen minerales críticos, como el litio, o que podrían ser productoras futuras, como es el caso de Aclara Resources con las tierras raras. Esto se produce luego que el presidente Trump ordenara una investigación sobre posibles nuevos aranceles a todas las importaciones estadounidenses de estos elementos estratégicos.
En el caso del llamado “oro blanco”, las dos productoras en Chile de este mineral -que no es concesible y por lo tanto operan bajo un contrato con Corfo- están monitoreando la situación. SQM, la principal productora de litio del mundo, explicó que “estamos analizando los detalles para estimar cuál podría ser el efecto real de los aranceles anunciados”.
“No obstante, poco menos del 10% de nuestras ventas totales fueron a Estados Unidos en 2024, de lo cual la mayoría fue yodo y nitrato de potasio (agrícola e industrial)”, detalló la firma chilena. “En nuestro entendimiento, los aranceles aplicados serían principalmente para productos que compiten con la industria local. EEUU casi no tiene producción de estos productos, por lo que preliminarmente es razonable esperar un impacto acotado”, aseveró.
Albemarle, la otra empresa que opera en el Salar de Atacama bajo un contrato con Corfo y de origen estadounidense, no quiso hacer declaraciones. Sin embargo, fuentes ligadas a la compañía en EEUU explicaron que el Gobierno tiene 180 días para analizar la situación y dar recomendaciones al presidente Trump. En este lapso “hay un proceso donde empresas como nosotros podemos dar nuestra opinión y vamos a seguir en contacto con las autoridades”.
En Penco, Región del Biobío, existe un proyecto de tierras raras que promete ser la alternativa al virtual monopolio que ejerce China sobre estos estratégicos elementos. Está a cargo de Aclara Resources, en cuya propiedad entró el Grupo CAP este año.
El gerente general de la firma, Nelson Donoso, explicó que “la competitividad global de las tierras raras como minerales críticos para el desarrollo de tecnologías limpias, electromovilidad y el avance de la descarbonización en el mundo genera una oportunidad única para Chile, y presenta una ventaja competitiva inigualable en el marco de la situación geopolítica”.
En Aclara, dijo Donoso, “estamos avanzando en el proceso de evaluación ambiental del proyecto de tierras raras, etapa clave y condición para el desarrollo sostenible”. En un claro guiño a la comunidad penquista, destacó que su proyecto se caracteriza por recircular el 95% del agua y utilizar el porcentaje restante de fuentes 100% recicladas, sin usar fuentes naturales. Además, no genera residuos industriales líquidos ni relaves.
El proyecto en Penco cuenta con 549 hectáreas y ya ha invertido US$ 150 millones. La construcción de la planta significará US$ 130 millones adicionales. Al enumerar otras ventajas del proyecto, Donoso aseguró que la empresa también propone “la revegetación de sus zonas operativas con especies nativas, aportando más de 100 nuevas hectáreas y la protección para la biodiversidad de otras 90 hectáreas en torno al estero Penco”.
Por todo esto, “creemos que el potencial de este proyecto junto con el propósito que compartimos con CAP de avanzar hacia la producción de magnetos permanentes, contribuirá al posicionamiento de Chile como proveedor de tierras raras para la transición energética y a la Región del Biobío en el marco de su Plan de Fortalecimiento Industrial”.