La presidenta del Palmeiras, Leila Pereira, cuestionó la multa de 50.000 dólares impuesta por actos racistas de hinchas de Cerro Porteño durante el encuentro de la Copa Libertadores Sub 20 y prometió tomar medidas más drásticas. En entrevista al canal CazéTV, Pereira expresó su descontento con la Conmebol, destacando que no se ha tomado acciones efectivas para combatir el racismo.
“Por retrasos en partidos hay una multa de 100.000 dólares, y por bengalas, 78.000 dólares. Esto nos parece vergonzoso”, dijo Pereira.
Además, la dirigente anunció que ha enviado una carta a la FIFA junto con los principales equipos brasileños de primera y segunda división. “Es una conmoción general en todos los clubes brasileños. La gran mayoría sufre racismo en partidos en América del Sur”, afirmó Pereira.
El Palmeiras buscará llegar hasta “la última instancia” ante la Conmebol, y si no se logra justicia, planean unirse a la Concacaf, una medida que les resultaría económicamente ventajosa. “Si Conmebol no respeta el futbol brasileño, debemos pensar en unirnos a la Concacaf”, sentenció Pereira.
Mientras tanto, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) se declaró “totalmente indignada” por la medida y cuestionó su efectividad. “La decisión no combate con el rigor necesario la discriminación racial ocurrida, sino que, lamentablemente, incentiva la práctica de nuevos actos delictivos”, declaró la CBF.
El incidente también tuvo un impacto en el jugador Luighi Hanri, quien lloró públicamente después del partido. Esta reacción generó rechazo por parte de diversos sectores, incluyendo el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, que pidió frenar “el odio disfrazado de rivalidad”.