En las playas de Tomé a Lota (en la región del Bío Bío), hubo un gran número de peces y aves que vararon en la costa.
Se registraron episodios de “varazón” de especies como sardinas, pejerreyes, jibias y cormoranes.
La principal causa parece ser el aumento de las temperaturas del mar debido a cambio climático.
El Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) pidió a la población no recoger ni consumir los peces varados, ya que se desconoce si contienen contaminantes. Además, en una playa llamada Colcura (en Lota), aparecieron 40 cormoranes muertos.
La causa de su muerte aún no se conoce, pero el alcalde del lugar dijo que la situación afectó al 70% del borde costero.
A pesar de esto, los visitantes pudieron disfrutar del balneario mientras trabajadores retiraban las aves muertas e implementaban medidas preventivas para evitar riesgos para la salud.