El mercado hipotecario en Chile enfrentó dificultades durante la pandemia debido a medidas como los tres retiros de fondos de pensiones. Un informe del Centro de Estudios Financieros del ESE de la Universidad de los Andes analizó el impacto de estos retiros sobre el financiamiento a la vivienda.
Maximiliano Villalobos, autor del estudio, explicó que los retiros inyectaron aproximadamente US$ 47 mil millones en la economía. Este ingreso generó un aumento inflacionario que alcanzó 12,8% en 2022, el nivel más alto desde 1993.
Para contener esta inflación, el Banco Central subió la Tasa de Política Monetaria (TPM) a 11,25% entre noviembre de 2022 y junio de 2023. Este aumento se reflejó en las tasas de los préstamos hipotecarios.
Por ejemplo, en enero de 2020, la tasa de los préstamos para viviendas con un plazo mayor a 21 años era del 2,61%. Un año después del tercer retiro, en febrero de 2022, subió al 5,17%.
Actualmente, a cinco años del primer retiro y considerando cifras hasta mayo de 2025, la tasa se sitúa en 4,51%. Los retiros desfondaron el mercado de capitales, reduciendo la oferta de créditos. Las instituciones financieras tuvieron menos capital para prestar, lo que llevó a un aumento en los precios.
Esta situación causó una caída en la actividad del sector hipotecario. El flujo mensual de colocaciones hipotecarias cayó 57% desde enero de 2020 hasta febrero de 2022.
A pesar de que las colocaciones para viviendas aún no han alcanzado los niveles prepandemia, ha habido un leve repunte en los últimos meses. Villalobos señaló que es prematuro determinar si políticas como el subsidio a la tasa de interés o al FOGAES son responsables de esta recuperación.
Asimismo, recordó la importancia de monitorear la inflación, la TPM, la guerra comercial y regulaciones, ya que estos factores afectan las tasas hipotecarias.