Harold Mayne-Nicholls y Eduardo Artés inscribieron sus candidaturas presidenciales ante el Servicio Electoral (Servel) en Santiago, marcando el inicio oficial de sus campañas para la elección de noviembre.
Mayne-Nicholls, quien llegó primero al organismo electoral, expresó altas expectativas para la contienda y se comprometió a presentar su programa de gobierno durante esta semana. En una declaración pública, Mayne-Nicholls esbozó los lineamientos centrales que guiarán su eventual gestión: “En primer lugar, es la seguridad como un todo, seguridad pública y seguridad ciudadana, pero también seguridad en salud, en educación, en vivienda, en jurídica, seguridad para los inversionistas”, destacó.
El candidato independiente enfatizó que su propuesta se sostiene sobre cuatro pilares fundamentales: educación, desatar el crecimiento económico, salud y vivienda. Mayne-Nicholls expresó confianza en superar la primera vuelta, basando este optimismo en la extensa recolección de firmas realizada. “Nosotros en la búsqueda de firmas recorrimos 85 comunas del país. Hoy día hicimos la presentación, la cantidad de kilómetros que hicimos era, si no me equivoco, 5,3 veces desde Visviri hasta la Antártida y de vuelta”, señaló. Añadió que continuarán visitando comunas para convencer a la ciudadanía.
Respecto de sus expectativas de campaña, Mayne-Nicholls hizo un llamado a una contienda limpia y centrada en las propuestas: “Yo espero que sea una lucha limpia, una lucha donde se impongan las ideas y no los temas personales, que no haya agresiones, que se acaben todas estas cosas que hemos escuchado en los últimos días”, señaló. Añadió que esas situaciones le incomodan y perjudican al país y la política, aspirando a una elección que genere orgullo.
Pasadas las 19:00 horas, Eduardo Artés llegó al Servel para inscribir su tercera candidatura presidencial. El profesor planteó una crítica radical al sistema imperante, argumentando que “nuestra candidatura se inscribe en la necesidad de cambiar el modelo económico y social existente. No es una candidatura cosmética para cambiar algunas cositas y seguir en más de lo mismo, como han sido todos los gobiernos que hemos tenido desde la salida del dictador de La Moneda”.
Artés atribuyó su postulación a un profundo descontento social: “Es impulsada por un descontento muy fuerte, grande, con un racismo falso, de una izquierda indefinida, hidropónica, que no está por las transformaciones que reclama la sociedad”, afirmó. En esa línea, definió su proyecto como un “gobierno patriótico, popular, de perspectiva socialista”, enfatizando que su programa busca transformar la sociedad.
Consultado sobre un posible apoyo a Jeannette Jara, candidata de la centro-izquierda, en una segunda vuelta donde él no estuviera presente, Artés condicionó su respaldo: “Con el programa actual que está confeccionando Jeannette Jara, yo no votaría por ella”, expresó. Así las cosas, el candidato estableció requisitos específicos para un eventual apoyo: “Tendría que aceptar algunos puntos de nuestro programa, fundamentalmente en renacionalización de los recursos naturales o recuperación del cobre, el litio, etc. Si estamos de acuerdo en algunas cosas de ese tipo, quizás podemos conversar”, cerró.