Saudi Aramco, la compañía petrolera más grande del mundo, está aumentando su inversión en combustibles sintéticos derivados de energías renovables. Según Ahmad Al-Khowaiter, vicepresidente ejecutivo de tecnología e innovación de Saudi Aramco, la prisa mundial por electrificar gran parte del transporte terrestre “no tiene sentido” desde una perspectiva climática para países como China, que depende en gran medida de energía del carbón.
Al-Khowaiter declaró: “Ha habido mucha expectación sobre el ritmo de la electrificación global. Tiene su lugar en el mercado, pero siempre se necesitarán otras soluciones, como los motores de combustión interna”.
La apuesta de Saudi Aramco por estos motores incluye una participación del 10% en Horse Powertrain, una empresa conjunta con Geely y Renault para crear un nuevo fabricante de motores. También anunció una colaboración con BYD, un fabricante chino de automóviles, para compartir tecnología de motores.
Los electrocombustibles (o e-combustibles) producidos principalmente a partir de electricidad renovable, químicos y agua, pueden reducir significativamente las emisiones. Al-Khowaiter mencionó que Saudi Aramco está construyendo dos proyectos en España y Arabia Saudita para producir estos combustibles.
Saudi Aramco invirtió “varios cientos de millones de dólares” en los proyectos e espera que estén funcionando a finales de 2027. Al-Khowaiter señaló: “Nuestro objetivo es satisfacer las necesidades de los fabricantes de automóviles para probar estos combustibles, así como para la Fórmula 1 y otros tipos de carreras de motor”.
El ejecutivo también afirmó que el suministro de electroqueroseno ayudará a los reguladores a comprender y certificar el nuevo combustible de aviación. La UE ha ordenado a las aerolíneas comenzar a utilizar e-queroseno para finales de la década, con aspiraciones de que represente un 35% del consumo total para 2050.
Aunque los precios de estos combustibles electrónicos no se espera que comiencen a caer pronto, Saudi Aramco cree que ayudarán a acercar las emisiones de autos híbridos al nivel de un auto eléctrico. Al-Khowaiter agregó: “La otra ventaja es que pueden impactar al 90% de la flota existente en lugar del 10% de los nuevos vehículos vendidos”.
Esta estrategia muestra la adaptación de Saudi Aramco a un futuro donde las energías renovables y las soluciones de combustible sostenibles podrían jugar un papel cada vez mayor.